Muy antiguo apellido catalán de origen toponímico, poco frecuente y registrado sobre todo en Barcelona y Lleida, siendo muy notable su presencia en Tarragona y Girona, y menor en Castellón, Alicante, Valencia, Baleares, etc.
Procede de aquellos lugares llamados Vall que se hayan repartidos por toda la geografía catalana, nombre derivado, en general, del llatí –vallis-, “extensió de terreny enclotat entre muntanyes”. Ya en el año 1399, Joan Vall fue elevado a la dignidad de Ciudadano Honrado de Barcelona, y armado Caballero en el acto de la coronación del rey Martín I, en Zaragoza.
En Barcelona, Ramón de Vall, maestro carpintero de fines del siglo XIV, es mencionado en un documento de concordia fechado en dicha ciudad en el año 1.399. A mediados del siglo XVI, en 1553, eran ya relativamente numerosas las familias que se apellidaban Vall en Catalunya, según se desprende de los datos que se recogieron en el Fogatge o censo de hogares que en dicho año se llevó a cabo, siendo su presencia especialmente notable en las “colectas” de las hoy provincias de Lleida, Tarragona y Barcelona.
Francesc Vall, vecino de Palafrugell (Girona), asistió a las Cortes catalanas de 1640, como Síndico por el Brazo Real, y Matías Vall, natural de Borges (Lleida), Familiar del Santo Oficio de la Inquisición, obtuvo del rey Carlos IV privilegio de Ciudadano Honrado de Barcelona, en 1.798.
Armas.- El “Repertorio de Blasones de la Comunidad Hispánica” recoge, en primer lugar: En gules, una banda, de azur, fileteada de oro.
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