Apellido vasco de origen toponímico, muy poco frecuente y disperso por España. El filólogo Gutierre Tibón señala que deriva del sustantivo –viña-, precedido de la preposición de lugar –tras-, es decir, “lugar situado detrás de la viña”, que dio nombre a una población situada en el valle de Arcentales (Vizcaya), de la que tomaron el nombre los progenitores de las familias así apellidadas, según fue costumbre en la Edad Media para indicar el origen geográfico de los individuos.
Endika de Mogrobejo, en su obra “Blasones y Linajes de Euskalerría”, recoge este apellido, del que dice que se registra como Traslaviña o Trasviña y que procede, en sus más remotos orígenes, de los pecheros del Señor de Vizcaya, siendo el primero del que se tiene noticia Juan García Traslaviña, cuyo hijo casó con una hija del alcalde de Pando.
De una antigua casa que hubo en el lugar de Linares, en el valle de Arcentales (Vizcaya) descendió Pedro Traslaviña, que nació en 1590 y casó, el 28 de diciembre de 1620, con Francisca Martínez, siendo padres de Juan Traslaviña, nacido en Linares (Vizcaya) el 8 de marzo de 1628.
Leonardo Traslaviña y su hijo Manuel Traslaviña Palacios, vecinos de Villanueva de la Presa y de Madrid, hicieron probanza de su hidalguía ante el Teniente Corregidor de Valmaseda (Vizcaya), en 1779.
Armas.- El antes citado Mogrobejo y el “Repertorio de Blasones de la Comunidad Hispánica” recogen para Traslaviña: En campo de plata, una muralla, de azur, con dos puertas, de oro, en los extremos.
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