Antiguo apellido de origen catalán, cuya forma primitiva y correcta de escritura fue la de Mallafré, siendo Mallofré una variante dialectal.

Hoy día goza de muy escasa difusión, registrándose sobre todo en la provincia de Barcelona, con algunas ramas en las de Tarragona, Girona, Lleida, Castellón, Madrid, Sevilla, etc. Según señala Moll en su obra "Els Llinatges Catalans", deriva del nombre personal de origen germánico Amalafrid, compost del radical Amal- (indicador d´una raça reial dels ostrogots) i frid (pau).

Aparece este apellido entre los primeros repobladores catalanes del antiguo reino de València, pues según el censo de población de la ciudad de Alicante del año 1421, era vecino de la misma un tal Joan Mallafré.

En Catalunya, según los datos recogidos en el censo de hogares del año 1553, Anthoni Mallafré era vecino de la villa de La Selva, en la llamada “colecta de Tarragona”. De una casa que hubo en Alcover (Alt Camp) por los años de 1700, descendió el médico Joan Mallofré, bachiller en Medicina, en Huesca, en 1789.

Un siglo más tarde encontramos documentado al litógrafo barcelonés Pau Mallofré, que en 1887 tenía su taller en la Plaza de San Miguel, 3. A finales del siglo XIX tenían los de este apellido casas en Barcelona, Castellví de la Marca, Font-rubí, Mediona, Olesa de Montserrat, Falset, etc.

Armes.- El "Reper­torio de Blasones de la Comunidad Hispánica" recoge para Mallafré/Mallofré: En sinople, una torre, de plata.