Apellido (también escrito Magrinyà) poco frecuente y registrado, sobre todo, en Tarragona y Barcelona.
Proviene del latín –Macrinianus-, derivado del nombre personal latino –Manlius-, de –macer-, “delgado”, “flaco o enjuto”. Pasaron los Magrinyà a la repoblación del antiguo Reino de Valencia, levantando casa en El Puig, en 1379.
Según los datos del “fogatge” catalán de 1497, Antoni Magrinyà vivía en El Vendrell (Tarragona), y, según el “fogatge” de 1553, había casas de Magrinyà en Reus, Vilasecra, Monroig, Puigdalfi, Constanti, Montoliu, Tamarit, Lo Catllar, Altafulla, Creixell i Roda y Torredembarra (Tarragona).
En 1650 floreció en Valls el "mestre de cases" Pere Magrinyà. Ya como Magriñá hubo casas, a partir del siglo XVIII, en Barcelona, Terrassa, Senmenat, El Papiol, Sitges, La Geltrú, Lleida, El Mercadal (Girona), etc.
El “Nobiliari del Reial Cos de la Noblesa de Catalunya”, de Lluís de Bru de Sala y Armand de Fluvià, cita a: Lluís de Magrinyá, Ciudadano Honrado de Barcelona, elevado a la dignidad de Caballero en 1683, y a Josep Magrinyá i Girona, natural de La Selva del Camp, Señor de la Montoliva (Vilallonga del Camp), elevado a la dignidad de Ciudadano Honrado de Barcelona en 1795. En Falset (Tarragona) existe una antigua casa solariega de esta familia.
Armas.- El “Repertorio de Blasones de la Comunidad Hispánica”, tomo letras M-R, página 1069, recoge las siguientes armas para Magriñá: En campo de oro, dos roeles de gules, puestos en palo.
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