Muy antiguo apellido de origen toponímico, poco frecuente y disperso por España, si bien se registra sobre todo en Madrid, siendo muy notable su presencia en Burgos y Vizcaya, y algo menor en Barcelona, Valladolid, Zaragoza, Guipúzcoa, La Rioja, Asturias, Teruel, Álava, Cantabria, Alicante, etc. Procede del topónimo Val, nombre de poblaciones en las prov. de Guadalajara, León, Zaragoza, Zamora, Toledo, etc., cuyo origen está en la forma apocopada val, derivada de valle, del latín vallis, “llanura de tierra entre montes”.
Hubo, por tanto, distintas casas de este apellido, no emparentadas entre sí, siendo muy antiguas las castellanas y aragonesas. Así, Esteban del Val ya vivía en Zaragoza en 1182, y Sancho del Val, asistió como Infanzón a las Cortes que Jaime I de Aragón celebró en Zaragoza en 1247. Probaron su hidalguía ante la Real Chancillería de Valladolid, entre otros: Juan del Val, vecino de Casalarreina (La Rioja), en 1591; Juan del Val, vecino de Soto, en 1596; Lope de Val, vecino de Cerratón (La Rioja), en 1510; Anselmo del Val, de Briviesca (Burgos), en 1816, y Diego del Val, vecino de Miranda de Ebro (Burgos), en 1639. Igual probanza hicieron ante la Real Chancillería de Granada, entre otros: Alonso del Val, de Huete (Cuenca), en 1511, y Pedro del Val, de Tinajas (Cuenca), en 1527.
Armas.- Unos (del) Val: En azur, tres bandas de plata, sembradas de armiños, de sable. Bordura de gules, con cuatro lobos de oro.
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