Apellido mallorquín, con dos casas solariegas, una en el lugar de Mayá y la otra en el Pujol de San Juan de Sineu. Todos los nobiliarios hacen descender a esta familia de Fulqueto Burzán, que se halló en la conquista de Mallorca y le tocó en el reparto general de las tierras la alquería Algerir, de tres yugadas, en el distrito de Inca. Juan B., capitán del ejército de don Jaime I de Aragón, el 6 de febrero de 1256, obtuvo privilegio de franqueza, extensivo, no tan sólo a todos sus sucesores, sino también a todos los que llevaran el apellido B. Jaime, en 1285, fue uno de los privados del rey don Juan II, siguiendo la suerte de este monarca cuando don Alonso III de Aragón le quitó el reino de Mallorca. Pedro, en la misma época, prestó juramento de fidelidad al rey don Alonso III, como representante de la villa de Rubinas, hoy Binisalem. Guillermo, en 1343, prestó igual juramento al rey don Pedro IV de Aragón, como diputado por la villa de San Juan.
De azur, con una banda de oro.
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