Linaje gallego, muy antiguo, de hijosdalgo, con casa solar en Vivero (Lugo). Don Juan Francisco de Hita atribuye su origen a los Villasanta, apellido que, según Juan Micio, se transformó después en B. Zazo y Rosillo y Lope Badillo afirman que B. y Basante son un mismo apellido. Otros autores manifiestan que tuvieron su origen en Castilla, pues un caballero castellano que en tiempo de Sancho IV el Bravo pasó a Galicia y casó allí, fué el fundador de los B. gallegos. Se extendieron éstos principalmente por las provincias de Lugo, Orense y La Coruña, y en la Real Chancillería de Valladolid probaron su hidalguía en los años que se indican, los siguientes: Francisco B., vecino de Rubiana, partido judicial de Valdeorras (Orense), 1740; Hernando, Rui y Juan de B., vecinos de Cedeira, del partido judicial de Ortigueira (Coruña), 1559 y 1526, respectivamente; Pedro B., vecino de El Rivero, partido judicial de Bande (Orense), 1534; Rui B., vecino de La Coruña, 1510; Alonso B., vecino de Fuentelapeña, del partido judicial de Fuentesaúco (Zamora), 1547; Fernando B., vecino de San Martín de Mondoñedo, 1506; José B., vecino de San Román y natural de San Martín de Mondoñedo, 1770; Rui B., vecino del mismo lugar, 1545; Andrés B., vecino de San Mamed de Oleiros (Lugo), 1703; Antonio B. y Saavedra, vecino de San Jorge del Río Abeso, del partido judicial de Villalva (Lugo), 1703; Carlos B. y Saavedra, vecino de Rillera de Cesuras (Lugo), 1794.
En azur, tres montañas de plata. Alias: Mantelado: primero, en sinople, un árbol de su color natural, perfilado de oro y a su pie una fuente con aguas de azur y plata, segundo, en gules, una sierpe descabezada de su color natural y el mantel de azur con un signo de Salomón de oro. Bordura de sable con cuatro aspas de plata.
|