Apellido de origen vasco, poco frecuente y repartido por España, si bien se registra, sobre todo, en Guipúzcoa, siendo notable su presencia en Vizcaya, Cantabria, Madrid y Álava. La voz –azpiazu- significa “mirador bajo el peñón”, “los bajos”. Mogrobejo indica que tuvo su origen en la villa de Azkoitia, desde donde pasó a Aizarnabazal y Azpeitia (Guipúzcoa). Otra rama pasó a Selaya (Cantabria), y de ella fue Juan de Azpiazu y Cuero, caballero de la Orden de Santiago, Comisario Real de Guerra, y su hijo Antonio de Azpiazu y Gracia, nacido en Cádiz en 1731, que probó su nobleza para ingresar en la Real Compañía de Guardias Marinas, en 1753. Otras líneas pasaron a Asturias y Castilla. Juan Martínez de Azpiazu probó su hidalguía en Azkoitia, en 1667, y Fco. de Azpiazu lo hizo en 1745.
Juan de Azpiazu hizo igual probanza en Zumaia, en 1708; Pedro de Azpiazu, en Zestona, en 1608; Domingo de Azpiazu, en Salinas, en 1777, y Sebastián de Azpiazu, en Arrasate, en 1732. Obtuvieron Sello Mayor de hidalguía en la villa de Bilbao: Manuel Ignacio de Azpiazu, natural de Azkoitia y vecino de Ondarroa, en 1706; José Antonio de Azpiazu, natural de Xemein y vecino de Zenarruza, en 1830, y Domingo de Azpiazu, natural de Azkoitia y vecino de Bilbao, en 1798. Armas.- Mogrobejo le asigna, en primer lugar: De oro, con un roble de sinople, terrasado de lo mismo, y al pie dos guerreros; uno con espada en la mano, en acción de herir al otro vencido, caído en tierra y entregando al vencedor una bandera de gules.
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