Muy antiguo apellido castellano de origen toponímico, poco frecuente y repartido por España, si bien se registra sobre todo en Madrid, Barcelona, Valencia, Albacete, Cuenca, Ciudad Real y Guadalajara, siendo menor su presencia en Alicante, Murcia, Valladolid, Vizcaya, Granada, Castellón, Tarragona, etc. Procede del topónimo Auñón, nombre de una población de la provincia de Guadalajara, cuyo étimo probablemente sea el latín -alneu-, “aliso”, que habría evolucionado hacia un hipotético -auño-.
Pedro I de Aragón envió como embajadores suyos al Papa, para que diese orden de expulsión de ciertos cruzados del condado del Rosellón, a mossén Guillén de Auñón y al noble Pedro Alemán. Ramas muy ilustres de este linaje crearon nuevas casas solariegas en Alcaraz (Albacete), Morón de la Frontera (Sevilla), Jerez de la Frontera (Cádiz) y otras ciudades de La Mancha y Andalucía. Probaron su nobleza ante la Real Chancillería de Granada, entre otros de este apellido: Alonso de Auñón, vecino de Albacete, en 1539; Antonio, Francisco y Pedro de Auñón, vecinos de Morón, en 1611; Diego y Cristóbal de Auñón, vecinos de Alcaraz, en 1581, y Patricio de Auñón, vecino de Iniesta, en 1691.
Armas.- De gules, con un castillo de plata aclarado de azur, sobre rocas de su color natural, y ante la puerta del castillo un guerrero armado de plata, jinete en un caballo del mismo metal, empuñando en la mano derecha una espada desnuda, en actitud de dar un golpe y asido con la izquierda a la aldaba de la puerta de la fortaleza.
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