Antiguo apellido castellano (en ocasiones escrito Sanemeterio), relativamente frecuente y repartido por España, si bien se registra sobre todo en Cantabria, siendo notable su presencia en Vizcaya, Madrid y Barcelona, y menor en Guipúzcoa, La Rioja, Málaga, Navarra, Asturias, Zaragoza, etc.


Procede este apellido del nombre de san Emeterio, quien junto con san Celedonio, siendo soldados al servicio de Roma, sufrieron martirio, a mediados del siglo III, por su fe cristiana, extendiéndose su culto, sobre todo, por el norte de España.


De hecho, una leyenda hace derivar el nombre de Santander (ciudad de la que ambos santos son patronos), de San Meder (San Emeterio). San Emeterio y san Celedonio son también patronos de Calahorra (La Rioja). El nombre Emeterio deriva del latín –emeterium-, “el que rechaza, defensor”.


En el Archivo General Militar de Segovia se guardan los expedientes de los oficiales: Valentín San Emeterio, Infantería, 1870; Marcelino San Emeterio y Almóniga, Voluntario Caballería, 1885; Marcelino San Emeterio y Salas, Voluntario, 1890, y Paulino San Emeterio y Salas, Voluntario, 1885. Antiguas casas de San Emeterio hubo en Orejo, Rozas de Soba, Suances, Secadura, Sta. Mª. de Cudeyo, Polanco, Santander, etc.


Armas.- El “Repertorio de Blasones de la Comunidad Hispánica”, tomo letras S-Z, recoge para San Emeterio: En campo de sinople, un castillo, de oro, sobre peñas del mismo metal.