Apellido de origen castellano derivado de la palabra homónima, su significado original era "adulador", que luego fue derivando a "regañón", y actualmente su uso más común en "perezoso". Los primeros linajes registrados aparecen en la conquista de Ibiza y Mallorca en el S. XII. Extendido por toda la geografía española, es más frecuente en Extremadura y sus provincias limítrofes.
|