Origen: Castellano. De la merindad de Trasmiera (Santander). Es el mismo apellido que Riba. Descripción del Escudo de Armas: En campo de gules un castillo de plata acostado de dos grifos rampantes de oro, uno acada lado, y superado de un águila de sable volante superada a su vez de una cruz floreteada de oro. Bordura de azur con ocho veneras de oro.

Apellido de origen toponímico, poco frecuente y con sus principales asientos en Cantabria, Madrid, Asturias y Barcelona, siendo notable su presencia en Málaga, Huesca, Zaragoza y A Coruña.

Es más frecuente como "de la Riva", con casas, sobre todo, en Madrid, Cantabria, Asturias y León. Tuvo su origen, por lo general, en lugares llamados Riva, como Riva de Ruesga (Cantabria), La Riva de Yuso (Cantabria), etc., aunque en algunos casos Riva puede ser una variante de escritura del apellido Riba, o del apellido Rivas.

Hubo antiguas casas de Riva, no emparentadas entre sí, en Cantabria, Castilla, Aragón, etc. Así, en el "fogatge" catalán del año 1358 ya se cita a una tal "Riva, mujer", vecina de la villa de Barberá (Tarragona). En el censo aragonés del año 1495 se citan varias casas de Riba o "de la Riba", en su mayor parte en la zona de la Ribagorza. Antonio Ibáñez de la Riva fue arzobispo de Zaragoza (1687-1710).

Ante la Real Chancillería de Valladolid probaron su hidalguía: Pedro Manuel Riva, vecino de Pradillo de Cameros (La Rioja), en 1789; Fco. Riva Calderón de la Barca, vecino de Cádiz y natural de Santander (Cantabria), en 1772, y Juan José Riva y Robledo, vecino de Madrid, en 1791. Ante la Real Chancillería de Granada lo hizo Pedro Riva Martín Campofrío, vecino de Piedras Albas (Cáceres), en 1626.

Armas.- El "Repertorio de Blasones de la Comunidad Hispánica" recoge par Riva, en primer lugar: En sinople, un caballero alanceando a un oso, tumbado en el suelo y goteando sangre.