En Cataluña, con casa solar muy antigua en la ciudad de Manresa. Sus descendientes figuraron entre los llamados hombres de para je, de condición notariamente hidalga. Crearon nuevas casas en las ciudades de Lérida y Barcelona. Coinciden los tratadistas que hemos consultado en afirmar que los P. de la casa solar de Manresa traían estas armas: De oro, con una faja de gules, acompañada de tres cabezas de águila de sable, dos en lo alto y una en lo bajo. Pero Costa asigna a los P., de Lérida, este blasón: De plata, con un pich, o piqueta, que tiene el hierro de sable y el mando de gules, puestos en situación de palo. Y este otro: En campo de azur, tres escudetes de plata puestos en triángulo, cargado cada uno de pich, o piqueta, con el hierro de sable y el mango de gules. En una enmienda manuscrita que aparece en el ejemplar de la Adarga Catalana, de Garma y Durán, que posee el autor de esta "Enciclopedia", y realizada por pluma anónima de la segunda mitad del siglo XVIII, pero sin duda cultivadora de estas materias, se atribuyen a los P., de Barcelona, estas otras armas: En campo de oro, un puente de piedra de tres arcos, bajo los que corre un río, surmontado de una mano de carnación con manga de gules y acompañado cinco espigas de sinople. No nos ha sido posible comprobar si tal enmienda es acertada.
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