En un fragmento de poema se da cuenta de este apellido que terminar su linaje en la conocida Batalla de Sierra Elvira o (el Desastre de Granada), en 25 de Junio de 1939. E aquí el fragmento.
El Infante Pedro conociendo sus menguas y noviciados
ordenó al Conde Federico que estuviera a su lado,
porque llevaba en su sangre de nazarí y era fiel cristiano,
Pedreiturria, el más austero de los nobles y el mejor armado.
Y fue Pedro quien tentado por la furia y la insensatez,
no escuchó al Conde que le suplicó ponerse a salvo,
¡Mi señor yo muero por ti, pero pon tu cabeza en tierra buena!
A lo que el imprudente infante contestó:
¡Oh cobarde, como regreso a Castilla con tamaña vergüenza!
No me robes esta gloria de Dios porque yo nací para ser Rey.
A la locura salió al paso Don Juan Alfonso de Haro,
que espada en mano corto las riendas del Infante,
y el vástago cayó de cruces y se rompió la cabeza.
A defenderle salió el bárbaro con valor desmesurado,
pero su pariente Diego lo cercenó por la espalda de un tajo,
y el último custodio de la fuente y la piedra calló en sacro.
Pedro herido y sin fuerzas fue puesto de regreso.
En la huida lloró doce veces por el conde bárbaro
y maldijo a Diego Gómez de Castañeda que iba delante,
quien sabiéndose culpable esperó el Genil,
que guardaba en sus aguas el desagravio,
pues le robó el botín y a sus mejores guerreros.
“!Salve Dios la corona y maldice a los truhanes!”
Dijo Pedro agonizante y delirante sobre una manta.
Es obvio que, Pedreiturria (Pedre-Iturria), no es más que la fusión de dos apellidos muy diferentes. El primero, Pedre, es de origen judío y posiblemente nazarí, según lo sugiere el mismo poema. El segundo, Iturria, es indiscutiblemente vasco. Se sabe que muchos apellidos de diferentes casas se fusionaron entre los siglos III y IX y este podría ser el caso de los Pedre que llegaron de palestina, y por su propio apellido se puede deducir que comerciaban o poseían piedras. Esta anotación sugiere una gran riqueza. En cambio, los Iturria son un linaje del norte, típicos guerreros que se convirtieron también al cristianismo en algún momento de este mismo periodo. Era común fusionar casas ricas con casas nobles y que los apellidos se convirtieran en uno solo. En ese caso, el que el apellido Pedre fuera delante podría dar cuenta de la riqueza que pudo haber aportado en la unión.
En el pasaje «y el último custodio de la fuente y la piedra calló en sacro». También es muy revelador. Significando el apellido «Iturria» lo mismo que «fuente» o que «caldero» y que en la simbología heráldica Pedre incluye en su escudo tres piedras (tres rombos) también sugiera la existencia de un escudo que no conocemos, pero que contenga ambos símbolos; al menos el «Caldero» y la «Piedra».
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