Muy antiguo apellido, poco frecuente y repartido por España, registrándose sus principales asientos en la Comunidad de Madrid y en las prov. Ciudad Real, Valencia, Cuenca y Barcelona; asientos menores se registran, entre otras, en las prov. de Pontevedra, Lugo, Guadalajara, Almería, Granada, Alicante, Málaga, Castellón, Toledo, Badajoz y Córdoba.


Este apellido, que también se registra como Mejía, es mucho más frecuente en su forma plural o familiar, es decir, como Megías o Mejías.


Procede de un antiguo nombre personal hispánico de etimología dudosa, tal vez variante de Matías, desde una forma arcaica Mexías; por otra parte, existió la antigua voz –megía-, “medicamento”, de donde también puede proceder, en parte, el apellido, formado a partir de apodos aplicados al que tenía por oficio la elaboración de medicamentos, en el sentido de “boticario”. Antiguas casas de este apellido hubo en Galicia y Castilla, desde donde pasaron al resto de España.


Alfonso Mexía, que desde Galicia pasó a luchar contra los rebeldes de Murcia llevando con él gente aguerrida y esforzada, se estableció en Monroig (reino de Valencia), premiado por Jaime I de Aragón. Probaron los Megía su nobleza e hidalguía, a lo largo de varios siglos, en las Reales Chancillerías de Valladolid y de Granada.


Armas.- El “Repertorio de Blasones de la Comunidad Hispánica” recoge, en primer lugar para Megía: En plata, un león, de gules, surmontado de un dardo, de sable.