Toponimo y apellido vasco registrado en el nomenclátor onomastico de Euskaltzaindia (Academia de la Lengua Vasca). Su significado es 'Valle', 'Vega'.
En tiempos muy cercaron unos de otros, si no en los mismos, aparecen en distintas comarcas del Norte, especialmente en las provincias vascongadas, caballeros de este apellido, siendo muy difícil averiguar si todos ellos formaban una misma familia o si pertenecían a casas diversas. Acaso fuera esto último, puesto que en el país vasco hay varios lugares que se denominan I., de los que debieron proceder, tomando su nombre por apellido, distintas familias de aquella región. Pero sea una o varias familias, no puede negarse su gran antigüedad. Todos los individuos nombrados en documentos antiguos y en las "Bienandanzas e Fortunas", de Lope García de Salazar, pertenecen a la época en que se iniciaron las guerra de los linajes o bando, y casí por los mismo años aparecen en Guipúzcoa, Vizcaya y Alava. Las casas más antiguas e ilustres de Ibarra son, probablemente, las vizcaínas, y éstas radicaron en Guecho, Sopelana, Urdúliz y Górliz, del partido judicial de Bilbao; en Abadiano, Berriatúa, Dima y Amorebieta, del partido de Durango; en Gordejuela, del partido de Valmaseda, y en esta villa, y en Mendeja, del partido de Marquina. De la casa de Guecho, llamada de Ibarra-Bengoa, dimanaron tres ramas, procediendo de la segunda los Condes de Ibarra, que se establecieron en Sevilla, y de la tercera los Marqueses de Arriluce de Ibarra. Los Condes de Ibarra formaron luego la cuarta rama de la repetida casa de Guecho. Con el descubrimiento del Nuevo Mundo, muchos fueron los hombres y mujeres que cruzaron el Atlántico en busca de un nuevo horizonte, y en concreto los que portando el apellido Ibarra, extendieron su linaje por América. Así pues, tras nuestra investigación realizada en el Archivo General de Indias, donde consta el nombre de los pasajeros que viajaron al Nuevo Mundo, encontramos que Don Martín de Ibarra, natural de Potosí, hijo de Diego de Ibarra y Magdalena de Ibarra, con su mujer doña Francisca de Zúñiga, y sus hijos , Magdalena y Francisco, partieron hacia Nueva España el 9 de julio de 1790.
|