Deriva de Vimara Pérez, quien vivió en la segunda mitad del siglo IX en el noroeste de la Península Ibérica.
Vimara procede del germánico Vigmar o Vigmarr, que, para unos, significa famoso en la batalla (vig = batalla y marr = famoso) y, para otros, caballo de batalla.
Vimara Pérez fue vasallo de Alfonso III, último rey de Asturias y primer rey de León, quien lo convirtió en el primer conde portucalense, después de reconquistar esta ciudad (Portus Cale era la denominación de la actual Oporto).
Fundó un burgo que llevó su nombre Vimaranis (genitivo latino de Vimara, es decir, "de Vimara"), cerca de Braga, considerado tradicionalmente como el origen de Portugal.
Es de notar la grafía “v” en latín antiguo se pronunciaba como semivocal (/u/) por lo que el nombre de la población debía pronunciarse /uimaranis/.
Con el transcurso del tiempo el gentilicio Vimaranis incorporó al inicio el sonido prostático /g/ y se nasalizó el sufijo, lo que derivó en el apellido actual, que admite 2 grafías: C(la más frecuente) o Guimaraens, fonéticamente idénticas.