Este apellido es muy extendido en la penísula con numerosas casas solariegas. Apareció inicialmente desde el siglo XI al XIV, particularmente en la defensa de las tierras de Cataluña contra la invasión francesa de 1.285 especialmente en las heróicas resistencias de Castelló de Ampuries y Perelada. Las referencias de esta familia parecen precisarse con más frecuencia desde el siglo XV al XIX en especial los hechos de la lucha sindical consecuente a la revolución industrial del siglo XIX, especialmente con la instalación del telar a vapor.
|