El origen de este ilustre apellido, por referencias de historiadores de la época, podríamos afirmar, pero no asegurar, que este escudo u otro muy similar a él, apareció inicialmente desde el siglo XI al XIV, particularmente en las campañas contra los turcos en 1.302 y parecen ser citados en las victorias de Artaki (Octubre de 1.302), Filadelfia (1 de Mayo de 1.303) y Monte Tauro (15 de Agosto de 1.304). Las referencias de esta familia parecen precisarse con más frecuencia desde el siglo XV al XIX en especial los hechos de lepanto, acompañando las tropas de asalto y abordaje de D. Luis de Requesens en los hechos de 1.571. Todo ello parece coincidir con la memoria familiar de algunos de los miembros de la rama de la familia Dobas. Son sus armas: En oro, un testuz, de toro, con una argolla en sus morros. El estudio del escudo heráldico familiar nos "habla" de quienes formaron el origen de la familia D., pues esa era su función, la de manifestar a los demás sus elementos diferenciales. Los esmaltes del arma de los D. pregonan los siguientes valores: el Oro es el símbolo del Sol, origen de la vida, sus características espirituales corresponden a la fé, clemencia, templanza, caridad y justicia, por otra parte dicho esmalte señala a la familia con la felicidad, el amor, la nobleza y el esplendor, es decir, es el más noble de los metales.
|