Antiguo apellido de origen toponímico, muy poco frecuente y disperso por España, procedente del topónimo Prada, nombre de poblaciones como Prada (Asturias, León, Orense, etc.), Prada de la Sierra y Prada de Valdeón (León), etc, derivado de la voz prado: “tierra muy húmeda o de regadío...”
Este apellido es mucho más frecuente como Prada, siendo “de la Prada” o “de Prada”, formas arcaicas de escritura. Tienen los “de la Prada” sus principales asientos en Madrid, Sevilla y Barcelona. Los más antiguos Prada tuvieron su arranque en Asturias, desde donde pasaron a Galicia y Castilla, etc. Probaron su hidalguía en la Real Chancillería de Valladolid, entre otros: Bartolomé Prada, de Tábara (Zamora), en 1567; Juan de Prada, de Arnedo (La Rioja), en 1589; Blas de la Prada, de Rodezno (La Rioja), en 1753, y Fernando de la Prada, de Briñas (La Rioja), en 1722. Igual probanza hicieron en la Real Chancillería de Granada, entre otros: Lázaro de Prada, vecino de Llerena (Badajoz), en 1777; Fco. de Prada Blanco, originario de Galicia, vecino de Granada, en 1799.
Armas.- El “Repertorio de Blasones de la Comunidad Hispánica” recoge, en primer lugar: En azur, un brazo, de plata, moviente, de la parte siniestra de la punta del escudo, entre llamas de fuego, de gules, que tiene en la mano, de plata, una espada del mismo metal; en la parte diestra del escudo, un libro abierto, de plata, surmontado de una estrella, de oro.
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