La voz pirenaica –borda-, “casa de labranza”, “choza de montaña”, vocablo de origen prerromano existente en aragonés, vasco y catalán, generó apellidos en Francia y España, tales como Borde, Borda, Laborde, Laborda, Deborde, Deborda, Labordeta, Bordalva, etc. El apellido Deborda, que en algunas genealogías familiares aparece escrito, indistintamente, Laborda o Deborda, goza en España de muy escasa difusión, con algunas casas en la provincia de Zaragoza, principalmente.

En Francia, en especial en la región de Poitou Charentes, hubo antiguas familias Laborda, Deborda o Deborde. Así, como Deborda se documentó una casa en la localidad de Ecuras (Charente), y otra, en 1701, en la localidad de Lesterps (Charente). En la villa de Aguarón (Zaragoza) se estableció una familia Deborda hacia principios o mediados del siglo XVIII, y en su iglesia parroquial fue bautizada, en 1788, Vicente Deborda, que casó, el 3 de febrero de 1816, con Manuel Bosqued o Bosquet. En la misma iglesia fue bautizado, el 4 de agosto de 1842, Domingo Deborda, hijo de Casimiro Laborda (obsérvese que el padre aparece como Laborda) y de María Tirado, etc. Pedro de Laborda, noble infanzón de Irisarri (Navarra), fue abuelo de Juanes de Laborda, que ganó ejecutoria de infanzonía en Zaragoza, en 1630. Fco. Manuel Laborda fue Alcalde de Zaragoza en 1780 y Ministro de la Audiencia de Aragón en 1799.

Armas.- Le asignamos las mismas que trae Laborda: En campo de gules, una sierra de oro, con guarda y armazón de plata y sable