Procede este apellido del nombre personal de origen germánico –Karl-, derivado del radical gótico -karl-, “hombre libre”. El nombre fue muy popular en la Edad Media debido al Emperador Carlomagno, y no ha dejado de usarse hasta nuestros días. Tienen los Carles su principal asiento en la provincia de Barcelona, a la que siguen las de Tarragona y Girona, siendo menor su presencia en Valencia, Lleida, Baleares, Alicante, Castellón, etc. Según señalan los García Carraffa en su obra “El Solar Catalán, Valenciano y Balear”, es el de Carles un antiquísimo linaje que tuvo una noble casa solar en la villa de Torroella de Montgrí (Girona). Los de este apellido pasaron a la conquista y repoblación de Mallorca y de Valencia. Así, en Valencia, entre 1300 y 1314, tenían casa en Oriola (Alicante). El “Nobiliari del Reial Cos de la Noblesa de Catalunya”, de Armand de Fluvià y Lluís de Bru de Sala, cita a: Onofre Carles, Ciudadano Honrado de Barcelona, año 1686, y a Martí Carles i de Teixidor, Caballero del Principado de Catalunya (1737), Noble (1737), mercader de Torroella de Montgrí (Girona).
Armas.- El “Repertorio de Blasones de la Comunidad Hispánica”, recoge, en primer lugar, para Carles: En gules, un castillo de plata aclarado de sable, y dos leones, de oro, rampantes y afrontados a los lados de la puerta, y, en punta, un lienzo de muralla, de plata, con puerta y almenas; medio cortado de sinople, con varias casas de plata aclaradas de sable, y partido de azur, con tres peces de plata puestos en palo.
|