Es el de Aldalla un apellido resultante de un error de escritura, registrado únicamente en Hispanoamérica, del muy antiguo apellido de origen alavés Aldaya, que goza en España de muy escasa difusión, hallándose su principales asientos en Navarra y Guipúzcoa. En ocasiones se encuentra escrito como Ardaya o Arcaya. Procede de la voz euskera aldai/ardai, “pastizal”, “cuesta”. Endika de Mogrobejo, en su obra “Blasones y Linajes de Euskalerria”, señala que tuvieron los Aldaya casas solares en el lugar de Amezaga, del Valle de Zuga, documentada en 1540; en el lugar de Larrinoa, de la Hermandad de Cigoitia, documentada en 1574, y en la ciudad de Vitoria, documentada en 1539. Sus ramas pasaron a Guipúzcoa, Vizcaya, La Rioja, Andalucía, Argentina y Colombia (países en los que comenzó a escribirse como Aldalla o Aldaya, indistintamente). Pedro de Aldaya, natural de Vitoria, ingresó en los colegiales del Colegio Mayor de Nobles de San Ildefonso y menores de Alcalá, en 1569. En el Archivo General Militar de Segovia se guardan los expedientes de los oficiales: Pablo Aldaya y Ayala, Caballería, 1873; Andrés Aldaya Gandazábal, Infantería, 1869; Juan Aldaya e Indart, Infantería, 1814, y Antonio Aldaya y López, Intendencia, 1833.

Armas.- El “Repertorio de Blasones de la Comunidad Hispánica” recoge para Aldaya: En campo de sinople, un losanje, de plata.