Antiguo apellido que aparece escrito como Albós o Albos, y cuya difusión es muy reducida. Según el padrón español, a enero del 2009, llevaban este primer apellido un total de ciento once personas, casi todas ellas radicadas entre las provincias de Barcelona y de Lleida. En Italia, México, Filipinas y otros países se registra la presencia de familias Albos. Procede, escrito Albós, según señala Moll en su obra “Els Llinatges Catalans”, del sustantivo arboç, "arbre que fa arboces".

Existe, no obstante, una población gallega llamada Albos en la provincia de Orense del que, al parecer, pudieron tomar algunas familias el nombre por apellido. Este apellido no aparece en los “Fogatges” o censos catalanes de hogares de los años 1358 a 1553, pero sí encontramos familias Albos en regiones de la vecina Francia, al menos, desde el siglo XVI (Cantal, Auvergene, Tarn, Marne, etc.), por lo que, probablemente, pudiera ser originario de dicho país. Por los años de 1800 floreció en la Ciudad Condal el escritor Jaime Albós, al que se debe la obra: "Discurso acerca de las ciencias físicas en relación con la filosofía de Santo Tomás". En el Archivo General Militar de Segovia se guarda el expediente personal del oficial llamado José Albos, del que sabemos que en el año 1879 ingresó en el Arma de Infantería.

Armas.- El “Repertorio de Blasones de la Comunidad Hispánica” recoge para Albos (lo recoge sin acento): En campo de plata, un brazo vestido de gules, moviente del flanco diestro, sosteniendo en la mano, un rosario del mismo color.

Antiguo apellido que aparece escrito como Albós o Albos, y cuya difusión es muy reducida. Según el padrón español, a enero del 2009, llevaban este primer apellido un total de ciento once personas, casi todas ellas radicadas entre las provincias de Barcelona y de Lleida. En Italia, México, Filipinas y otros países se registra la presencia de familias Albos. Procede, escrito Albós, según señala Moll en su obra “Els Llinatges Catalans”, del sustantivo arboç, "arbre que fa arboces". Existe, no obstante, una población gallega llamada Albos en la provincia de Orense del que, al parecer, pudieron tomar algunas familias el nombre por apellido. Este apellido no aparece en los “Fogatges” o censos catalanes de hogares de los años 1358 a 1553, pero sí encontramos familias Albos en regiones de la vecina Francia, al menos, desde el siglo XVI (Cantal, Auvergene, Tarn, Marne, etc.), por lo que, probablemente, pudiera ser originario de dicho país.

Por los años de 1800 floreció en la Ciudad Condal el escritor Jaime Albós, al que se debe la obra: "Discurso acerca de las ciencias físicas en relación con la filosofía de Santo Tomás". En el Archivo General Militar de Segovia se guarda el expediente personal del oficial llamado José Albos, del que sabemos que en el año 1879 ingresó en el Arma de Infantería. Armas.-

El “Repertorio de Blasones de la Comunidad Hispánica” recoge para Albos (lo recoge sin acento): En campo de plata, un brazo vestido de gules, moviente del flanco diestro, sosteniendo en la mano, un rosario del mismo color.