Significa "sacerdote, Abad" del italiano Abate. Esto fue utilizada como un apodo para alguien o un apellido ocupacional de un trabajador en casa de un sacerdote.

Quien fuera el principal ascendiente y tronco propagador de este ilustre linaje se ignora por su remota antigüedad, siendo por tanto tradicional e inmemorial la nobleza de sus hijos, no siendo esta la más esclarecida de sus líneas la que arraigó y floreció en Sicilia de donde procede este linaje, de allí pasó a España. Unos lo escriben De A. y otros Abate, pero es uno mismo. Pindoro A., natural de Mesina, casó con Lucrecia Solima, y tuvieron por hijo a Juan A., que contrajo matrimonio con Laura Lanza, también natural de Mesina e hija de Francisco Lanza, Barón de Moyo, natural de Randazo, y de doña Isabel Solima, todos, como los anteriores, hijodalgos en Sicilia, según costumbre y fuero de España. De la unión de Juan A. con Laura Lanza, nació Francisco A. y Lanza, natural de la ciudad de Randazo, en Sicilia, y Caballero de Alcántara en 1625. El estudio del escudo heráldico familiar nos "habla" de quienes formaron el origen de la familia A., pues esa era su función, la de manifestar a los demás sus elementos diferenciales. Los esmaltes del arma de los A. pregonan los siguientes valores: el Sinople (verde), señala las características de la familia a las que fué concedido el escudo de armas que describimos y son tales como el vigor, el afán de victoria y el alto aprecio al honor y a la amistad, además otras características les enriquecieron como la alegría, esperanza, abundancia y caridad, tal es el significado de este esmalte que significa tierra. El esmalte color plata, corresponde al símbolo de la pureza, templanza, caridad y fidelidad, todas estas cualidades caracterizaron a los miembros del linaje Abate.